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Sobre BetWarrior

Justamente, no se trata de nosotros, se trata de ti.

De quién eres, de qué estás hecho, de lo que estás dispuesto a hacer; y sobre todo, de lo que estás buscando. ¿Para qué viniste?

Sabes perfectamente que hay algo que no está del todo bien; lo ves, lo sientes; está ahí, te inquieta, empuja, incomoda; y sin embargo, ahí lo dejas: oculto, atado, reprimido.

Tú lo sabes y nosotros lo sabemos. En tu casa, en la oficina, en la calle, en el bar; está ahí, siempre está ahí. Eres tú, en otra dimensión: intensa, riesgosa, extrema.

Nunca se trató solo del juego, ni siquiera de ganar; mucho menos de competir: se trata de luchar, de dar pelea; de asumir y enfrentar el riesgo.

Se trata de tomar decisiones sabiendo que no hay vuelta atrás; de ir, errar y volver a ir.

CONECTAS CON ESA DIMENSIÓN Y ENCUENTRAS:

La mejor combinatoria de apuestas deportivas.
No se trata de lo que podamos ofrecerte, si no de lo que estés dispuesto a dar.

Una experiencia 100% tuya.
Aprendemos de ti (esperamos que valga la pena) y actualizamos permanentemente tu propia dimensión. Más arriesgas, más te desafiamos. Más luchas, más fuerte golpeamos.

La mejor tecnología, la mayor agilidad.
¿Qué tan rápido eres?. Antes de animarte a pedirnos una mejora, asegúrate de que no te la hayamos dado mientras tú perdías el tiempo tratando de entenderla.

Estadísticas y material audiovisual en vivo para ayudarte en cada apuesta. Aunque, si necesitas ayuda...

HAY UN JUEGO DENTRO DEL JUEGO Y SABES QUE ES TUYO. CONQUÍSTALO.
LOS PRIMEROS WARRIORS

Betwarrior nace de la frustración, la envidia y el fracaso.

Si hubiésemos podido jugar dignamente al fútbol, basket o golf, no existiría BetWarrior.

Los primeros Warriors fuimos dos deportistas frustrados que encontramos en la posibilidad de crear un nodo de apuestas deportivas la oportunidad de jugar contra todo aquel que sí había logrado consagrarse como deportista de elite.

Luego, a partir de la unión de fuerzas con Shape ese espíritu revanchista se iría moldeando hasta alcanzar grados de inteligencia, dominio y aptitud insospechados en un principio.

Así, aquellos dos Warriors entendimos que mejor que vengarse sería jugar; mejor que romper el juego, usarlo.

Supimos que existen otras dimensiones: juegos dentro del juego, nuevas dimensiones para jugar con y contra quienes juegan.

No tenemos las grandes fortunas, las pantallas, ni los flashes que ellos tienen; pero tenemos el juego, y los tenemos en el juego. Tenemos la lucha y la tenacidad, por eso somos Warriors.

SÍ, SOMOS LOS QUE NO LO LOGRARON. SOMOS LOS FUTBOLISTAS QUE ERRARON, LOS PILOTOS QUE CHOCARON, LOS JOCKEYS QUE SE CAYERON Y ASÍ Y TODO JUGAMOS... SIEMPRE JUGAMOS.